La canície, que consiste en el blanqueamiento del cabello, es un fenómeno natural y progresivo que se produce por la disminución o pérdida de la actividad de las melanóticas, las células productoras de melanina, según explica el Dr. Jaqueline Zmijevski, dermatóloga por la Sociedad Brasileña de Dermatología (SBD).
“La melanina es el pigmento que da color a la piel y al cabello, y existen dos tipos principales: la eumelanina, que da color marrón o negro, y la feomelanina, responsable de los amarillos y rojos. Las hebras grises o blancas tienen menos o ninguna melanina”, dice.
Hay diferentes razones que pueden hacer que algunos, o eventualmente todos, los cables se vuelvan blancos. “La principal es la genética: la ciencia ya identificó algunos genes involucrados en este complejo proceso. Se sabe, por ejemplo, que la mitad de la población caucásica encanece antes de los 50 años”, comienza el doctor.
“Otras posibles explicaciones además de la genética son los problemas de salud: la deficiencia de vitamina B12 (común en las dietas vegetarianas) y la enfermedad de la tiroides”, añade.
Además, algunos hábitos pueden favorecer la aparición temprana de canas, entre ellos el tabaquismo, ya que hay estudios que demuestran que los fumadores tienen 2,5 veces más probabilidades de tener canas antes de los 30 años. El estrés también es un factor que puede interferir con la melanina en los cables.
“Otra curiosidad es la diferencia entre hombres y mujeres canosos. En las mujeres, los primeros blancos aparecen en la región de implantación del cabello, justo en la frente. En los hombres, las sienes, a los lados, suelen ser la primera zona afectada”, apunta la especialista.
En el caso de personas menores de 20 años que ya presentan canas, la canicie puede considerarse precoz.
“Probablemente sucede por un agotamiento del reservorio de melanocitos o algún cambio en la activación o migración celular, generalmente agravado por factores ambientales, como la contaminación y la exposición solar intensa o el estrés psicológico. A esta edad, es importante someterse a una evaluación para excluir algunos síndromes raros que se presentan con la caña temprana, como Vogt-Koyanagi-Harada, Waardenburg e incluso el vitíligo del cuero cabelludo”, dice el Dr. Jacqueline.
Según el dermatólogo, todavía no hay tratamiento para la canicie. Destaca que hay activos tópicos y orales que están en estudio, pero nada con evidencia científica que indique su uso solo para este fin. “Por ahora, el camino es recurrir a los tintes y tónicos tradicionales”, destaca.
“Un consejo importante para quien quiere acabar con las canas definitivamente es invertir en hidratación y humectación, ya que el cabello blanco es más poroso, quebradizo y seco. Para quitar el aspecto amarillento, puedes usar shampoos tonificantes, esos morados. Pero no abuse de él, restrinja su uso a una vez por semana, o cada 15 días, ya que puede resecar aún más los hilos”, concluye el Dr. Jaqueline Zmijevski.