Para asegurar un envejecimiento saludable , es importante incluir el culturismo en tu rutina, especialmente después de los 30 años.
Según un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad de Copenhague, Dinamarca, las personas mayores que levantan pesas logran ralentizar el proceso natural de pérdida de masa muscular.
El entrenador personal Caio Signoretti, especializado en musculación, destaca que la práctica regular de la hipertrofia es capaz de retrasar la pérdida de masa magra, así como de masa ósea, proceso que ocurre naturalmente en la vejez. Por eso el culturismo es tan interesante para asegurar un envejecimiento saludable.
“A partir de los 30 años, nuestro cuerpo empieza a perder más o menos un 0,5% de masa corporal magra al año. Este porcentaje puede llegar hasta el 2% anual a partir de los 60 años, cuando también se produce la pérdida de masa ósea”, dice.
Sin embargo, el especialista advierte que no es cualquier actividad física la que brinda mejor calidad de vida en la vejez.
“Las personas no pierden masa muscular porque están envejeciendo, envejecen porque están perdiendo masa muscular. Y no es cualquier ejercicio lo que detendrá este proceso. Una caminata , por ejemplo, no promueve la salud al nivel de retrasar el envejecimiento porque no genera mayores adaptaciones musculares”, comienza.
“Por eso, lo ideal es entrenar pesas con intensidad, hasta el fallo de los músculos, es decir, hasta el máximo que el alumno tolere. Eso es porque, hoy en día, los ancianos sienten mucho dolor en las rodillas, en la columna y empiezan a tener inflamación en las articulaciones precisamente porque no tienen los músculos lo suficientemente fuertes para proteger esas extremidades”, agrega.
EJERCICIOS PARA EL ENTRENAMIENTO DE CULTURISMO
También menciona algunos ejercicios que pueden formar parte de una rutina de fortalecimiento muscular para mantener la salud del adulto mayor.
“Me gusta decir que todos nosotros, no solo los adultos mayores, necesitamos ejercicios básicos, a los que llamo EPA: empujar, jalar y ponerse en cuclillas. Algunos ejemplos son el press de banca o el press de hombros o la flexión de brazos, que tienen la misma activación muscular. Los ejercicios de tracción, ya sea vertical u horizontalmente, son actividades que trabajan todos los estabilizadores de la columna y dorsales, que son los músculos responsables de la postura. Y agacharse, que también son básicos en nuestro día a día, como sentarse en una silla, agacharse para recoger un objeto del suelo, en definitiva, estos movimientos hay que entrenarlos”, destaca.
Para que el resultado de la actividad física sea efectivo, es fundamental prestar atención a algunos puntos. Según él, el culturismo siempre debe superar la capacidad del entrenamiento anterior y necesita ser variado.
“De nada sirve hacer siempre los mismos ejercicios, siempre con la misma carga y la misma secuencia. Para evitar que tu cuerpo se estacione, es necesario estimularlo, al menos cada mes, de forma diferente. Esto se puede hacer, por ejemplo, aumentando la carga, la cantidad e incluso el orden de estos ejercicios. Todas estas son actitudes necesarias para sacar al cuerpo de la zona de confort”, dice.
RESTRICCIONES
Salvo que exista un factor patológico, no existe ninguna restricción para que las personas mayores practiquen el culturismo.
“Si el anciano está sano, no tiene restricciones y puede hacer los mismos ejercicios que un joven. El gran punto es que, con el paso de los años, las personas mayores sedentarias, especialmente, acaban desarrollando algunas patologías, y si hay algún tipo de limitación hay que adaptar la formación. Por ejemplo, si el anciano tiene inflamación en la rótula, debe evitar impactos, como saltar y correr”, informa.
AYUDA DE UN PROFESIONAL
El entrenador personal destaca que el entrenamiento de fuerza, además de aportar beneficios para la salud, puede aportar un resultado estético . Por eso, lo ideal es hacer los ejercicios de forma frecuente, intensa y acompañada de un profesional, que planifique el entrenamiento y decida los cambios necesarios para estimular el cuerpo.